Condenaron al empleado de la funeraria por la selfie de Maradona en el cajón

La muerte de Diego Maradona estuvo marcada por un hecho insólito y repudiable que ocurrió en las horas previas al velorio que se realizó del Diez en la Casa Rosada. Y es que empleados de la funeraria se fotografiaron con el cuerpo del futbolista.

Diego Molina es uno de los que aparece en aquella imagen y este miércoles tuvo lugar la condena que la Justicia le aplicó por «profanación de cadáver humano», que en principio incluye cuatro días de prisión en suspenso.

Durante los próximos ocho meses, Molina deberá ir a la fiscalía cada vez que lo llamen, cumplir 50 horas de tareas comunitarias y donar 10 mil pesos a la Fundación Integra Asociación Civil, dedicada a la recuperación de adictos en La Matanza.

En base a la versión que el empleado de la funeraria dio entre sus vecinos, él solo compartió la foto con su familia y luego alguien de su entorno la publicó en las redes sociales.

“No hay pena suficiente para la aberración que hicieron estos salvajes pero tanto yo, como las hermanas de Diego, estamos satisfechos de haber logrado que ese hecho no termine impune. Tal como le prometí a la memoria de mi amigo y a sus hermanas, llevamos esta causa hasta el final y ahora vamos estar atentos a que se cumpla con las tareas y con la donación a la Fundación que ayuda a los chicos que tienen problemas de adicciones”, dijo Matías Morla, el abogado querellante que representó en la causa a las hermanas de Diego.

Y agregó: “Esperamos pronto se resuelva el recurso presentados por los otros dos imputados y que terminen con la misma pena».

Molina no es el único con cuestiones judiciales pendientes por aquellas imágenes. Claudio Fernández y su hijo Sebastián son los otros dos acusados que aún no recibieron sentencia.

Padre e hijo habían solicitado la nulidad del juicio. El pedido fue rechazado en primera instancia y ahora es analizado por la Cámara de Casación.